quarta-feira, 11 de abril de 2012

NUDOS BÁSICOS

Existen muchas clases de nudos adecuados para atar un extremo de la cuerda a tu propio arnés. Pero el nudo estándar por excelencia es el “doble ocho” y se utiliza tanto en escalada indoor como en roca. Al igual que la mayoría de los nudos de escalada (los nudos primarios específicos de escalada son seis, pero para trepar en un rocódromo sólo necesitas conocer éste), el nudo en forma de "ocho" es como la cincha de una silla de montar: cuanto más se apriete más seguro será. Al igual que con otros nudos, hay que revisar dos veces el "ocho", antes de confiarle tranquilamente tu incolumidad. En ciertos gimnasios tienen tas cuerdas ya preparadas con un nudo en un extremo y el escalador sólo debe unir el nudo a su arnés por un mosquetón de seguridad. Con este procedimiento eliminan la posibilidad de que el nudo falle, dado que los principiantes no siempre están seguros de cómo se hace el "ocho”.

Sin embargo este sistema fomenta la comisión de otro "pecado cardinal" en la escalada en roca: hay que evitar llevar material/peso innecesario encima, en este caso el mosquetón extra. De todas formas, siempre que se empleen correctamente, los mosquetones modernos tienen resistencia de sobra para este cometido.

Dentro de este apartado realizaremos una distinción entre:

·         Nudos para anillos de cinta.

§  Nudo plano.

·         Nudos para unir cuerdas:

§  Pescador doble.

§  Pescador triple.

§  Nudo corredizo.

·         Nudo asegurador / descendedor improvisado:

§  Nudo dinámico.

NUDOS PARA ANILLOS DE CINTA

Las cintas presentan una notable tendencia a resbalar sobre sí mismas cuando no se realizan los nudos adecuados. Resulta peligroso emplear para anillos de cinta, el margarita (pescador simple), el bulín (as de guía), el pescador doble y el nudo americano (plano, con un cabo introducido en el interior de la propia cinta tubular). Sólo debe utilizarse el nudo plano.

NUDO PLANO

Este es el nudo más usado entre los escaladores para hacer cintas exprés o anillos. Desgraciadamente, tiene cierta tendencia a aflojarse, por lo que cada cabo ha de salir del nudo al menos 7 cm y lo hemos de revisar antes de cada uso.

Alguna gente soluciona este problema cosiendo ligeramente los cabos de manera que estos no puedan escaparse (desaconsejable).

Después de hacer uno de estos nudos compruébalo, incluso cargando el peso del cuerpo (por supuesto cerca del suelo).

Realización:

- Haz un nudo simple en un extremo de la cinta.

- Coloca los dos cabos enfrentados e introduce el extremo libre en el nudo siguiéndolo.

- Los cabos sobrantes han de quedar en sentido opuesto y medir como mínimo 7 cm.

NUDOS PARA UNIR CUERDAS

1. PESCADOR DOBLE

Este nudo sirve para unir cuerdas por lo que se usa generalmente para hacer anillos de cordino, drizas, poner cordinos para empotradores, etc... También hay quien lo utiliza erróneamente para anillos de cinta -aunque queda más abultado que el nudo plano- ya que tiene menos tendencia a aflojarse antes de haber sido cargado ¡No emplear con cintas!

Realización:

- Gira el extremo de una cuerda dos veces alrededor de la otra. Luego vuelve el extremo por el centro de la espiral.

- Repite la misma operación, esta vez enrollando la segunda cuerda alrededor de la primera, pero en dirección opuesta.

- Finalmente tira de los cuatro cabos para tensar un nudo contra otro y conferir firmeza al conjunto. Los cabos sobrantes han de medir al menos 7 cm.

2. PESCADOR TRIPLE

Este Pescador es más seguro que el Pescador doble. Por esta razón se usa para unir cordinos de Spectra, un material que, aunque muy resistente, presenta problemas con la estabilidad de los nudos.

Realización:

§  La realización de este nudo es igual a la del Pescador doble, pero girando cad cuerda tres veces alrededor de la otra.

3. NUDO CORREDIZO

La ventaja de este nudo es que se produce un estrangulamiento en el objeto laceado que le confiere una mayor estabilidad. Bajo tensión no se corre solo, por lo que es muy indicado para conseguir un ajuste voluntario regulable.

Realización:

§  Forma un bucle. Toma ahora el cabo superior y haz otro bucle que introducirás en el primero.

§  Coloca este segundo bucle alrededor del objeto a lacear y ajústalo a él.

ASEGURADOR / DESPENDEDOR IMPROVISADO

1. NUDO DINÁMICO

El nudo dinámico constituye un excelente recurso a la hora de asegurar o rapelar sin nuestro descendedor. Por ello, y ya que la posibilidad de perderlo siempre está presente, todo escalador debería conocerlo. Se recomienda el uso de un mosquetón de pera -lógicamente con seguro-, ya que el nudo dinámico necesita espacio para poder invertirse dentro del mosquetón durante las operaciones de dar y recuperar cuerda. Por último, no debemos olvidar colocar el cabo de carga Junto al eje del mosquetón para obtener de él su máxima resistencia. El inconveniente de emplear este nudo es que riza las cuerdas.

Realización

- Forma un par de bucles en la cuerda de la manera que muestra el dibujo y pliega el segundo hacia el primero.

§  Chapa un mosquetón de seguro cogiendo ambos bucles y asegúrate de que el cabo de carga está colocado junto al eje del mosquetón.

§  - Comprueba que has hecho el nudo correctamente y cómo funciona en ambos sentidos. No olvides que tu compañero está al otro extremo de la cuerda.

MOVIMIENTOS BÁSICOS

Cada escalada es diferente y el proceso de descubrir qué es lo que funciona en cada vía y con cada persona, mantiene la novedad y la emoción durante la coreografía del ascenso.

Hay numerosas reglas fundamentales aplicables a todo tipo de escalada que debes conocer: la coordinación armónica de manos y pies permite movimientos más fluidos; a menudo el equilibrio, la agilidad y la flexibilidad son mejores armas contra la gravedad que la fuerza bruta. Generalmente la resistencia resulta más importante que la potencia a secas; hay que saber ahorrar fuerzas manteniendo el peso sobre los dos pies, en lugar de colgarse de los brazos; la mejor manera de hacer una escalada significa subir con el menor esfuerzo posible. Y para finalizar, estar relajados es haber ganado media batalla. Es cierto; la escalada resultan en gran medida pura intuición y los movimientos vendrán con más naturalidad si tu mente está relajada.

La regla fundamental para escalar un muro vertical es mantener el peso sobre los pies. Están mejor preparados para soportar el peso que los brazos, ya que estos se cansan más rápidamente independientemente de lo fuertes que los tengas. Mantener el peso sobre los pies es el resultado de llevar el cuerpo en buena posición. En los muros con inclinación inferior a 90 grados (es decir, semiverticales) el cuerpo debe permanecer en la misma posición erguida que llevas cuando caminas por el suelo, con el centro de gravedad directamente en los pies. Y esto por las siguientes razones: primera, la posición vertical es la única naturalmente equilibrada. El primer reflejo de los principiantes, aplastarse contra el muro, puede que Íes haga sentir más seguros pero la verdad es que desequilibra completamente el peso del cuerpo y cuando este desequilibrio se transmite a los pies, estos tienden a patinar fuera de la presa. Segunda razón: cuando el cuerpo está en posición vertical, la cara del escalador no está pegada al muro (de esta forma tiene mayor campo de visión para ver cómo y por dónde proseguir). Así que ponte erguido y bien equilibrado sobre los pies, manteniendo sobre ellos todo tu peso.

USO DE LOS PIES

Básicamente debemos escalar con los pies, empleando los brazos únicamente para mantener el equilibrio mientras te desplazas de un agarre a otro. Al principiante le suele costar fiarse de sus pies, sin embargo, sólo cuando te percates de que los pies de gato agarran perfectamente sobre la pared, podrás empezar a explorar las diferentes maneras de utilizar las presas.

Además de la adherencia pura, donde simplemente pegas lo más posible la suela de tus pies de gato a las presas o al muro, hay maneras básicas de mantenerse sobre las presas que a continuación analizamos.

·         Técnica de punteo

Hay que apoyar toda la suela que puedas sobre la mayor superficie posible, para maximizar la adherencia. Los principiantes tendrán que esforzarse conscientemente en hacer fuerza con los dedos para mantener el agarre. A veces puntear depende más de la propia capacidad para elegir un buen lugar donde hacerlo, de la agudeza visual para saber localizar irregularidades, pequeñas rugosidades y muescas. En declives más uniformes llevar el talón bajo permite que la goma bajo la planta del pie, relativamente más ancha que el resto, se adhiera mejor al terreno permitiendo a los músculos gemelos una posición más relajada. El punteo o canteo frontal provoca mayor esfuerzo en pies y gemelos que la acción de cantear lateralmente.

Por inseguro que pueda parecer en un primer momento, cantear frontalmente, como cualquier movimiento de la escalada vertical, resulta algo natural que se aprende fácilmente, descubrir cómo mantenerse en un ángulo imposible y colocar de manera óptima el pie es sólo cuestión de tiempo y experiencia. Gracias a las superadherentes suelas de goma cocida, hoy en día puntear constituye la mejor manera de sacar partido a las presas de pie más indefinidos.

·         Cantear

El canto del pie de gato se coloca directamente en la parte mejor y más aguda de la presa, y al descansar el peso del cuerpo sobre los pies la suela encuentra un agarre firme, adaptándose y "mordiendo" el canto del mismo. En las vías verticales o extraplomadas, cantear es la mejor manera para que la parte inferior del cuerpo del escalador esté más cerca del muro, lo que distribuye mejor el peso del cuerpo y reduce el esfuerzo de los brazos. El canteo lateral es el método básico para mantenerse sobre las presas de pie, pero es necesario practicarlo mucho para sacarte el mayor partido.

Generalmente se cantea con la parte interior del pie, cerca del dedo gordo, porque tanto tu pie como la mayoría de los pies de gato actuales están diseñados para mantenerse mejor sobre esta zona de la zapatilla. Además - ya tendrás ocasión de comprobarlo- cuando canteas en pequeñas presas es muy importante poder "sentir" lo bien o mal que el pie de gato agarra, y es justo alrededor del dedo gordo donde tu pie está más sensible y mejor preparado para ello.

Aunque normalmente se escala de cara al muro, muchas veces tendrás que pasar una pierna por debajo de la otra, especialmente al hacer travesías; en estos casos es esencial saber realizar perfectamente cualquier canteo exterior.

·         Giro de cadera

Esta técnica se emplea especialmente en terrenos verticales; también en este caso se utiliza el canteo pero con la parte exterior del pie, para conseguir mayor alcance con las manos y forzar las caderas hacia arriba. El canteo exterior casi siempre se hace con la parte del pie que nace justo detrás del dedo meñique. La estructura de los huesos del pie hacen que esta zona sea rígida, en clara oposición al resto de la parte exterior del pie, más carnosa y flexible, que haría que el canto del pie resbalara fuera de la presa. Y más en este caso en que el pie está retrasado. El giro de las caderas es conocido como "bloqueo lateral" o "lolotte".

·         Talonear.

Básicamente, talonear consiste en enganchar o empotrar el talón del pie de gato en cualquier protuberancia que admita semejante movimiento. La mayoría de las veces el pie se levanta de golpe sobre la cabeza y se apoya por el talón sobre una gran presa. Desde esta posición el talón presiona sobre la presa, mientras el pecho se dobla hacia el muro y hacia arriba hasta alcanzar con la mano la presa sobre la que se talonea.

Cuando en un muro vertical hay que hacer movimientos laterales, el cuerpo cuelga hacia atrás de tal forma que parece querer separarse de la cara. Para limitar el efecto de la gravedad los escaladores prefieren talonear sobre un agarre lateral que esté por debajo de su cintura, para mantener el cuerpo en buena posición mientras tengan presa para las manos. De todas formas talonear requiere mucha flexibilidad y energía. Constituye una técnica que tiene muchas aplicaciones y variaciones, pero lo más habitual es emplearla cuando se necesita un "tercer brazo", o para mantener un equilibrio que de otra manera sería imposible.

·         Paso en X

El paso en X es el proceso de contraponer los pies sobre presas oblicuas bastante separadas entre sí, lo que hace que las piernas adquieran una típica posición en equis. El problema clásico de este paso surge en los diedros, donde el escalador mantiene el equilibrio contraponiendo la fuerza de ambas piernas. En esta posición, la presión que se ejerce sobre las presas puede resultar insuficiente, especialmente si las presas son pequeñas o están en declive. Las posibles variaciones son incontables: puedes hacer un giro de cadera sobre un pie, puntear con el otro, apoyar la palma de una mano mientras la otra se agarra...; las claves son flexibilidad y equilibrio.

En términos generales, las NORMAS a seguir son las siguientes:
* No desplaces los pies hasta que no estés seguro de dónde los vas a poner. El tamaño y la situación de la presa determinan su utilidad. Siempre que puedas, coloca los pies por debajo de las manos para aliviar el esfuerza de la parte superior del cuerpo.
* Coloca el pie justo en la parte mejor de la presa. Enfoca la presa como un arquero la diana y concéntrate en ella en cuanto pongas el pie encima.
* Desplaza el peso de una presa a otra con fluidez.
* Manten el pie totalmente inmóvil mientras permaneces sobre un apoyo. Utiliza como bisagra la articulación de las caderas para independizar los movimientos de la parte superior del cuerpo, porque mover el pie puede significar resbalar fuera de la presa. Concéntrate en mantener los pies quietos y en la fluidez de movimientos, sobre todo al transferir el peso. Con un poco de experiencia ya verás como todo esto te sale con naturalidad


LAS PRESAS DE MANOS.

Las presas de manos modulares pueden tener cualquier forma y tamaño. En los muros verticales, en donde tus brazos han de soportar mucho peso, se suelen colocar agarres grandes, pero esto no significa que siempre sea así. En las vías con un ángulo poco exagerado, las manos sirven más que nada para mantener el equilibrio, siendo posible la superación incluso sobre una pequeña regleta. Pero a medida que el muro se va desplomando va siendo más complicando mantenerse sobre las presas, y ello va exigiendo una mayor potencia por tu parte. Por ello es necesario agarrotarse, ya que es la manera más rápida y segura de agotarse prematuramente y caer del muro.

Mientras seleccionas mentalmente las presas de manos, planea e imagina la mejor secuencia. Cuanto más separadas y mas por debajo de los hombros estén las manos, más extenuante resultará el trabajo de los brazos.

·         Cómo agarrar la presa

Debemos mover bien los dedos sobre la presa para localizar la mejor forma de agarrarla; si notamos un buen borde para los dedos, aunque sea pequeño, "pínzalo". A veces encontraremos un relieve donde apoyar la palma de la mano, lo que añadirá seguridad a nuestra presa. Cuando encontramos una buena mo sigamos buscando.

A continuación analizamos los distintos tipos de presas que podemos utilizar.

·         Presa abierta.

En la presa abierta los dedos siguen el contorno de la roca sin proyectarse hacia fuera, de esta forma no tienen que soportan el tremendo esfuerzo que genera un apalancamiento. La presa abierta constituye la mejor alternativa en presas redondeadas o en grandes agujeros. A medida que la presa resulta más escasa, no sólo hay "menos" donde agarrarte, sino que la fuerza que deben hacer tus dedos se incrementa dramáticamente: aquí es donde el pulgar entra en acción.

·         Presa de yemas

Hacerlo con los dedos juntos y doblados, poniendo el dedo pulgar sobre el índice para reforzar la presa. Esta forma de agarrarse se llama "presa de yemas" por ser esta parte de los dedos la que está en contacto con el muro. Como el pulgar se apoya directamente en el muro, soporta mucha menos presión que los demás dedos; además, el pulgar es el dedo más fuerte y añade una considerable potencia a tu presa.

La crispación de esta forma de agarre sobrecarga seriamente los tendones de los dedos, por lo que los escaladores que realizan mucha actividad prefieren emplear siempre que pueden la presa abierta.

·         Pinzamientos

Este tipo de presa resulta de inestimable utilidad cuando te superas sobre una estalactita calcárea y los pies presionan sobre agarres escasos. A veces todo lo que tendrás para superarte será un "garbanzo" de roca que podrás pinzar entre el pulgar y la parte lateral del dedo índice, generalmente a la altura del segundo nudillo.

·         Presa doble

A veces podremos apoyar el dedo pulgar por encima de los demás dedos y envolviéndolos; la sujeción conseguida puede resultar tremendamente poderosa debido a la mayor fuerza del pulgar.

En agarres muy grandes puedes aliviar la tensión de los antebrazos doblando las muñecas de forma que la parte inferior e interna de la mano se adapte a la presa. En general la presa doble se emplea más bien como posición de descanso, dado que es difícil superarse de esta forma. En el muro del gimnasio se emplea sobretodo en grandes agarres.

·         Escalada sobre agujeros.

Superarse sobre agujeros resulta especialmente divertido. Es una clase de escalada que puede resultar bastante agotadora, y se suele encontrar sobre piedra caliza, conglomerado y arenisca. Gran parte de la moderna escalada deportiva se desarrolla sobre estas presas de agujero, razón por la cual muchos muros de gimnasio tratan de replicarlos. El tamaño puede variar muchísimo. Cuando escalemos sobre agujeros, buscar bien la parte más profunda para poder asirnos. Los que están excavados hacia un lado o se desarrollan hacia arriba es preferible usarlos como presas laterales o invertidas.. Si el agujero admite dos dedos -bidedo- utiliza el dedo corazón y el anular para equilibrar el peso sobre la mano. A menudo es la propia forma de la presa la que aconseja el empleo de los dedos índice y corazón. Si el agujero admite tres o cuatro dedos, estás de suerte: muchas veces un buen cazo aparece justo cuando lo necesitas, y te aseguro que pocas cosas te harán sentir mejor.

·         Presa invertida

Siempre que para agarrar la presa tengas que colocar la palma hacia arriba estarás haciendo un agarre invertido. Esta técnica se emplea como táctica de equilibrio hasta que la mano libre alcanza una presa mejor por encima. La presa invertida más elemental es la que haces oponiendo la presión de la mano, o manos, que tiran hacia abajo del agarre en el que estás bloqueando, contra la fuerza que hacen tus pies impulsándose hacia arriba.

·         Presas laterales

Cuando el agarre está orientada verticalmente, o casi, resulta complicado superarse de abajo a arriba; es preferible emplearlo como canto lateral. Se trata de colocar el cuerpo fuera y a un lado de la presa, haciendo trabajar manos y pies en oposición. Si el agarre lateral mira a la derecha coloca el cuerpo a la izquierda de forma que puedas apoyarte en él. Lo ideal sería que encontráramos una presa de pie que mire a la izquierda, por debajo y ligeramente a la derecha del agarre lateral de la mano, para poder sujetarte por oposición.

MOVIMIENTO COORDINADO DE PIES Y MANOS: IMPULSO ASCENDENTE Y ESCALADA DINÁMICA.

Hasta ahora hemos hablado de los movimientos de manos y pies por separado. Sin embargo, el propósito de la escalada es coreografiar los diferentes movimientos en un único y fluido movimiento ascendente- Para comprender mejor la dinámica del IMPULSO ASCENDENTE vamos a ver una por una las diferentes formas de progresar sobre un muro vertical. Básicamente hay tres maneras de usar las piernas para impulsar tu cuerpo hacia arriba, venciendo la gravedad.

El paso estático es generalmente la forma más extenuante y, por tanto, menos eficiente de moverse. Se realiza manteniendo el peso sobre una pierna, mientras el otro pie se coloca simultáneamente sobre una nueva presa.

El paso de muelle aprovecha el movimiento dinámico para desplazar con mayor eficiencia el peso corporal. Justo antes de elevar el pie hacia arriba, "botas" sobre ese pie para impulsar dinámicamente hacia arriba tu cuerpo. Este "bote" puede ser muy sutil o de lo más exagerado, dependiendo de la distancia a cubrir, el estilo de cada escalador y la relativa seguridad de la presa. Esta técnica resulta incomparable cuando es preciso cargar el peso con gran delicadeza sobre presas pequeñas.

El paso de la rana consiste en elevar primero un pie y luego el otro, mientras el tronco se mantiene al mismo nivel sin ganar altura. Cuando el segundo pie llega a la presa el escalador se encuentra prácticamente en cuclillas, en posición de "rana". En ese momento ambas piernas pueden empujar juntas para elevar el cuerpo.

LA ESCALADA DINÁMICA

EL MOVIMIENTO DINÁMICO es otra manera de describir el impulso con que un escalador salta desde un agarre hasta otro. Son pasos que implican desde un saltito de pocos centímetros hasta un brinco al máximo, en el que el escalador se desprende completamente del muro antes de agarrar velozmente una presa por encima, justo en el ápice de su salto.

La escalada dinámica y los lanzamientos solicitan enormemente brazos, hombros y dedos, por lo que resulta necesario poseer una óptima base física como escalador.

El terreno más propicio y habitual para utilizar los movimientos dinámicos es el extraplomo, donde se utiliza para cubrir grandes distancias entre buenas presas; lo que no quiere decir que alguna vez no haya que hacerlo para lanzarse desde un agarre malo a otro mucho peor.

Empezaremos colgándonos derechos de los brazos, con las piernas encogidas y listos para hacer fuerza. No debemos a hacer dominadas sobre los brazos como preparación para el intento, porque sólo conseguirás consumir tus fuerzas. En lugar de eso ve buscando la presa a la que nos dirigimos, imaginando cómo la vas a agarrar y luego lanzándonos a por ella con tu mente concentrada en ella como si fuésemos un gato. Cuando el ataque esté en marcha, dispara una mano hasta agarrar la presa por la que estás luchando.

Hay muchos más variantes de movimientos dinámicos que cada cual podemos descubrir por nosotros mismos.

SEGURIDAD Y PREVENCIÓN DE ACCIDENTES EN ESCALADA

Es el tema más importante y delicado desde el punto de vista educativo, por lo tanto deberemos abordarlo con seriedad y profundidad, transmitiendo esta idea a los alumnos. Las clases en el centro escolar siempre deberán cumplir la siguiente norma de seguridad: no subir a más de dos metros y medio del suelo y colocar colchonetas debajo de la zona de actividad Es conveniente formar grupos de clase estables que se encarguen, asumiendo la responsabilidad por turnos (estos pueden ser semanales), de revisar tanto la consistencia de las presas como de la colocación de protecciones, colchonetas, etc.; el profesor no debe relajarse en este tema y participar de forma activa.

Hay dos tipos de actuaciones en relación con la seguridad:

Llamamos SEGURIDAD ACTIVA a las maniobras que realizan movimientos (tres apoyos como mínimo, peso sobre los pies, etc.) y utilización de elementos materiales (cuerdas, arnés, ochos, cintas exprés, etc.); y a las actitudes (atención, concentración respecto al compañero y a uno mismo) que toman las personas en el momento o durante la realización de la actividad .

La SEGURIDAD PASIVA hace referencia a las precauciones y revisiones que se realizan antes de iniciar la actividad (protección de elementos que podrían resultar peligrosos, revisión del material, revisión de la zona de escalada, accesos, vías, posibles caídas de piedras, etc.). Antes de realizar cualquier práctica debemos revisar los elementos que se van a utilizar, buscando minuciosamente cualquier saliente, punta, objeto cortante, etc., que pudiera tener el gimnasio, para protegerlo con algún elemento evitando su peligrosidad. También, como se ha dicho anteriormente, explicaremos claramente a los alumnos que la altura máxima de ascenso sin la protección del arnés y la cuerda no puede exceder los dos metros y medio o la altura de las espalderas, además de colocar colchonetas debajo cuando algún movimiento tenga riesgo de caída.

A continuación, plasmaremos a grandes rasgos algunas de las ACCIONES PREVENTIVAS a tener presente en la ESCALADA.

·         Respetar el tiempo, un solo parte meteorológico no siempre es suficiente, ante la duda no salir. Muchos accidentes se han producido por no tener previsiones del tiempo o por cambios bruscos de éste.

·         En relación con el punto anterior, las tormentas son peligrosas, se han producido bastantes muertes por rayos.

·         La rotura de cuerdas. Las cuerdas actualmente son de muy buena calidad pero no resisten las caídas sobre aristas o el apoyo sobre ellas, el contacto con productos químicos como el ácido de las baterías, la pintura que se utiliza para marcar a veces la mitad de la cuerda, etc., también las puede deteriorar.

·         Las cuerdas que se han usado muchas veces para escalar de segundo no se deben utilizar para escalar de primero.

·         Una cuerda que haya sufrido muchas caídas pequeñas, no deberá utilizarse para escalada en roca.

·         No fiarse de una cuerda que tiene cinta aislante, puede esconder daños importantes.

·         Los mosquetones se pueden abrir si no están bien colocados, el gatillo en malas posiciones, etc. hay que revisarlos siempre.

·         Cuidado al encordarse, al atarse con la cuerda al arnés y al descolgar al compañero, han ocurrido varios accidentes por no estar bien realizadas estas maniobras.

·         No hay nada mejor y más seguro que el arnés de dos piezas, el de cintura con el suplemento de pecho (no el arnés integral que es incómodo y doloroso).

·         El rápel con nudo dinámico y mosquetón y el rápel sincronizado sólo se debe hacer en clase sin altura (máximo dos metros y medio).

·         La comunicación insuficiente es otro peligro, malos entendidos han producido muchos accidentes, al hablar con el compañero se dan órdenes incompletas o el que las debe recibir no está atento (suelen ocurrir en rocódromos). La comunicación óptica puede ser la solución cuando la situación lo permite.

·         No confiar en anclajes y chapas oxidadas, herrumbrosas o con mala presencia.

·         Llevar la cuerda entre las piernas escalando de primero, enrollada o cruzada es peligroso.

·         Para rapelar no sirve cualquier clavo o anclaje, revisar bien dónde fijar la cuerda antes de iniciarlo.

·         El casco se ha demostrado que es un elemento de seguridad imprescindible en escalada. Los de ciclista sin rendijas por donde se pueden colar piedras son adecuados.

·         La situación jurídica de los “sin casco”, si se producen lesiones -y con ellas gastos - por no llevar casco, podrá recaer sobre el herido, al menos parte de la culpa y en ocasiones toda ella.

·         Utilizar un bloqueador automático grigri, aumenta la seguridad en un rocódromo.

·         Sujetar la cuerda entre los dientes antes de chapar puede resultar peligroso.

·         El que asegura debe estar entre dos y tres metros de la pared, además si esta asegurando a un compañero/a que pesa más que él deberá anclarse a un elemento seguro.

·         Nunca se debe descender a un compañero pasando la cuerda por una cinta o cordino, ya que se queman con el roce de la cuerda.

EQUIPOS BÁSICOS PARA LA ESCALADA DEPORTIVA

La UIAA (Unión Internacional de Asociaciones de Alpinismo, la Federación Internacional de Montañismo y Escalada) es la encargada de aprobar la seguridad de los muy diversos implementos de aseguramiento, ya que de su preciso funcionamiento depende la integridad física del escalador. Ellos son:

- Arnés: Sirve para retener al escalador en caso de caída, así como para el aseguramiento del compañero. Existen diferentes tipos de arneses, para usos diversos: A) Arnés de cintura: distribuyen el peso del cuerpo en la parte inferior de las piernas en caso de caída, usualmente utilizado por los principiantes que escalan con cuerda desde arriba. Los expertos lo utilizan para abrir ruta o asegurar al compañero.

B) Arnés de pecho: impide que el torso del escalador se incline y es usualmente combinado con un arnés de cintura.

C) Arnés completo o integral: integra en un mismo arnés el de cintura y el de pecho. Garantiza que el escalador cuelgue de la cuerda en posición erguida; es ampliamente recomendado para los niños escaladores.
- Cuerdas de escalada: tiene la función de retener el escalador al caerse y al descender o rapelar.

Debe ser elástica, no deben formarse nudos y debe ser fácil de anudar. La longitud varia dependiendo si se trata de muros artificiales (40 mts) o roca natural (50 mts). La vida útil de la cuerda depende del uso que se le dé. Existen cuerdas de menos elasticidad, denominadas estáticas, las cuales se utilizan en la escalada en top rope (piñata), durante los entrenamientos y en la iniciación deportiva en los muros o paredes de escalada.

- Mosquetones: son piezas metálicas utilizadas para diversas funciones en la escalada. Generalmente se utilizan con otras piezas metálicas, tales como aseguradores-descendedores, ascendedores o en combinación con cintas tubulares cosidas, formando las denominadas “cintas exprés”. Existen dos tipos de mosquetones, con una gran variedad de formas y tamaños: los simples (con puertas rectas y curvas) y los de seguridad.

- Zapatos de escalada (pies de gato): es un calzado especial para este deporte, pues debe permitir una gran adherencia a los apoyos (naturales o artificiales). Su suela es especial: plana, de caucho, tiene un extraordinario ajuste que facilita un buen agarre y permite al escalador adoptar una postura relajada, incluso al apoyar los pies en minúsculos agarres.

- Aparatos de freno para el aseguramiento (aseguradores o descendedores): no existe ningún freno completamente seguro por lo que es recomendable que los escaladores aprendan a manejar y entender el

funcionamiento del equipo:
a) Ocho: debe fijarse al arnés con un mosquetón de seguridad. Es necesario tener siempre la cuerda agarrada con la mano de frenado;

b) Gri-Gri: es un aparato semi-automático, que bloquea la cuerda al momento de la caída, gracias a una leva giratoria que se activa al sentir el peso de la caída; d) Stop: es un aparato de frenado utilizado en la escalada en roca; y e) Pirámides y ATC: son piezas de metal en forma de pirámide o circulares, utilizado en forma similar que el “ocho”.

- Bolsa de magnesio y magnesio: El carbonato de magnesio es un polvo blanco fino que seca el sudor de las manos. Se coloca dentro de un pequeño bolso que va colgado de la cintura del escalador, al alcance de sus manos.

- Cintas exprés: Están conformadas por una cinta cosida de alta resistencia y dos mosquetones simples, uno con puerta curva (para el mosquetoneo) y otro con puerta recta (para colocar en la chapa). Se utilizan cuando se escalada abriendo y sirven para asegurar la cuerda que lleva el escalador.

- Casco: es utilizado en la escalada en roca y durante la iniciación deportiva en la escalada en muro. Su misión es prevenir las posibles lesiones en la cabeza, originadas por choques contra la roca o en caso de rocas o piedras que caen.

- Jumar: es un aparato utilizado para ASCENDER en una cuerda. Se emplea para subir en tramos de roca o muro extremadamente difíciles o imposibles. En la escalada de competencia es utilizado por los denominados armadores de ruta, para acceder rápidamente a los lugares en los cuales colocan las presas de las rutas de competencia.

- Presas o agarres: son piezas de resina-sílice, construidas especialmente para las paredes artificiales de escalada; sobre ellas, los escaladores realizan sus movimientos de ascenso. Se realizan pequeñas esculturas con las formas específicas (diseñadas por escaladores expertos), de las cuales se construyen moldes y luego se vacía en ellos la resina mezclada con sílice y colorantes.

- Escalada urbana o buldering: escalada en fachadas de edificios y otras construcciones urbanas. Normalmente está prohibida por las leyes.


MODALIDADES DE LA ESCALADA

La escalada puede practicarse en distintos medios y de formas diferentes, permitiendo superar retos físicos y vencer temores. Existen varios tipos de escalada cuyo nivel de riesgo varía:

- Escalada clásica: consiste en subir por una pared de roca sin utilizar ayudas artificiales y elementos de seguridad colocados en las paredes rocosas (tales como chapas, rines y otros). Se utilizan elementos como “pepas”, excéntricos, stoppers, friends y otros, los cuales se insertan sobre grietas y agujeros en las rocas, colgando de ellos las cintas exprés que permitirán el aseguramiento de los escaladores.

- Escalada deportiva: Es la más practicada en la actualidad, debido a que permite minimizar los riesgos de la escalada clásica. Es similar a la clásica, pero se realiza en vías o paredes previamente preparadas con seguros fijos (chapas, rines, reuniones y otros); esto permite que el escalador sólo utilice las cintas exprés y la cuerda.

- Escalada en rocódromos (muros o palestras): es la practicada en una pared artificial que simula ser una de roca. Se utiliza para entrenamientos y competencias. Esta modalidad de la escalada es la que ha experimentado un desarrollo considerable, pues existen diversas competencias nacionales, continentales y mundiales, en las cuales participa un número cada día más creciente de escaladores y países. Esta escalada presenta tres modalidades competitivas: Dificultad, Velocidad y Bloque.

- Boulder (Bloque): escalada sin asegurar, sin cuerdas y solo con colchones de seguridad, hasta una altura tal que permite saltar o caer al suelo sin posibilidades de lesiones. Puede realizarse en rocas o en muros de escalada.

- Escalada superlibre: es similar a la escalada clásica, pero los escaladores no utilizan elementos de seguridad, confiando en sus condiciones físicas y psíquicas, pero sin tomar en cuenta los posibles imprevistos de la naturaleza. No es recomendable, ya que no se utiliza ningún implemento de seguridad y cualquier accidente puede ser mortal

HISTORIA DE LA ESCALADA

Según antiguos registros, Antoine De Ville ascendió el Mont Aiguille el 28 de junio de 1492; muchos años después, en 1786, se registraría el primer ascenso al Mont Blanc; sin embargo, suele considerarse que la escalada en roca comienza a practicarse como deporte en las primeras décadas del siglo XX.

Esta calificación de la escalada se consolida en Europa con la conquista de las Grandes Jorasses, el Eigerwand y la cara norte del Cervino, un trío que se calificó como "los tres últimos problemas de los Alpes". Con la conquista de una cumbre como filosofía, este deporte comenzó a ganar adeptos y tomó distintas vertientes.

Además del objetivo de coronar altos picos del mundo, los escaladores comenzaron a experimentar la fascinación de descifrar caminos en paredes rocosas que planteaban un complejo acertijo a quien quisiera recorrerlas en vertical, por muy corta que fuera la distancia, es así como nace el boulderismo, que consiste en subir rocas que exigen un gran nivel técnico aún cuando no representan grandes alturas sobre el nivel del mar.

Ante esta necesidad de plantearse día a día nuevos retos y tomando en cuenta la complicación de trasladarse a latitudes que permitan practicar la escalada surgen las paredes artificiales (denominados muros, rocódromos, o palestras), que en los últimos años han alcanzado gran popularidad. Estos muros prediseñados han permitido que esta práctica extrema haya tomado un nuevo impulso en el ámbito competitivo y comercial convirtiéndose en todo un espectáculo al que puede acudir el público en general.